El día después de las Paso: Perotti paga caro la unificación de las primarias provinciales y nacionales

Mal asesorado por un círculo íntimo integrado por dirigentes rafaelinos de escasa experiencia, Perotti decidió unificar los comicios provinciales y nacionales, padeciendo los efectos del voto castigo hacia la gestión de Alberto Fernández.

Perotti y Corach, durante un acto oficial. El círculo íntimo del gobernador
está integrado por dirigentes rafaelinos de cabotaje.

Por Fernando Garello – Durante más de una década, los sucesivos gobiernos del Frente Progresista desdoblaron los comicios provinciales y nacionales en la provincia de Santa Fe, evitando de esa manera que la política nacional termine influyendo en la decisión de los votantes santafesinos. Sin pensarlo demasiado, Omar Perotti decidió volver a unificar lo que sería su primera elección de medio término, con los resultados por todos conocidos: Juntos por el Cambio superó con comodidad al Frente de Todos.

Para tomar esa controvertida decisión, el gobernador se basó en el asesoramiento de su círculo íntimo, conformado mayoritariamente por dirigentes rafaelinos que lo acompañan desde que ocupaba la intendencia de su ciudad como Marcos Corach o Roberto Mirabella. Este último encabezó la lista de precandidatos a diputados nacionales que ayer fue superada por Juntos por el Cambio.

El factor inseguridad

La equivocada decisión de unificar los comicios no fue el único factor que determinó la derrota del Frente de Todos en Santa Fe. Gran parte del electorado también castigó al gobierno de Omar Perotti por su inacción en materia de seguridad que determinó que la provincia hoy tenga la tasa de homicios más altas del país. A buena parte del electorado no se le pasó el hecho de que la gestión de Perotti evitara situar el problema de la inseguridad en la agenda electoral, desplazándolo a un lugar secundario, cuando llegó al poder hace casi dos años prometiendo precisamente “paz y orden”.

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