“La autovía de la Ruta 34 será la obra de mayor impacto regional”, decía Perotti en 2010
Corría el primer mandato de la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner y el candidato a gobernador del Frente Juntos anunciaba eufórico “la puesta en marcha” de una obra que evitaría muchas muertes pero que lamentablemente nunca se concretó.
La trágica muerte de seis personas en un siniestro que tuvo lugar recientemente sobre la ruta nacional 34 y el acceso San Juan, reeditó el debate recurrente sobre la necesidad de concretar la ampliación de la ruta nacional 34, una de las obras más anunciadas y manipuladas con fines electorales de la historia política regional, donde el senador nacional Omar Perotti fue un protagonista indiscutido.
El hoy candidato a gobernador del Frente Juntos nunca se privó de utilizar el proyecto para satisfacer sus necesidades electorales y las de su partido. Por ejemplo, en 2010, cuando se desarrollaba la primera presidencia de Cristina Fernández de Kirchner, anunciaba con toda la pompa posible que la “la autovía de la Ruta 34” sería la obra de “mayor impacto regional”.
Perotti pronunciaba esas palabras mientras recorría la ruta nacional junto a medios de comunicación de su ciudad que confiaban en que la obra estaría finalizada en un par de años. Lamentablemente para los ciudadanos que utilizan la vía de comunicación a diario, estaban equivocados, por que sin la decisión política y los recursos presupuestarios necesarios, el proyecto languidecería hasta el presente y sólo se reactivaría en los meses previos a los actos eleccionarios.
Perotti ya sabía en ese momento que los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner solamente tenían interés en avanzar con los contratos que le otorgaban a Lázaro Baez, quien devolvía las prebendas alquilando los hoteles del matrimonio presidencial, tal como está quedando demostrado en el proceso judicial que se está llevando adelante y por el cual el propio empresario testaferro y ministros de la talla de Julio de Vido, se encuentran presos, mientras la ex presidenta está procesada y con pedido de detención.
Una obra con cuentagotas
Sin embargo, en 2014, y a pesar de los escandalosos retrasos registrados, sobre el final del segundo mandato de Cristina Fernández de Kirchner, Perotti volvió a prestarse a una maniobra destinada a engañar a la opinión pública y al mismo tiempo a presionar al gobierno que pudiera sucederlo, apoyando la adjudicación de contratos celebrados con la cuestionada empresa concesionaria del corredor vial, la que se haría cargo de los trabajos que no fueron ejecutados.
Esos contratos tejidos a espaldas de la sociedad y en función de intereses políticos y empresariales, tampoco estaban destinados a ser cumplidos y la obra volvió a languidecer, ya durante la gestión de Mauricio Macri.
Si los Kirchner se dedicaron a enriquecer su patrimonio con la obra pública, Macri se concentró en realizar grandes proyectos en distritos privilegiados, especialmente en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En el medio, los ciudadanos de Sunchales y del resto de localidades de la región se vieron obligados a circular por una ruta insegura cuya peligrosidad se ve incrementada por los trabajos paralizados que desde 2010, cuando Perotti lo anunció con bombos y platillos, se llevan adelante a paso de tortuga y con cuentagotas.
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