Ponce utilizó grupos de choque para evitar que trabajadores de SanCor se manifiesten
El gremio hizo inteligencia para neutralizar una auto convocatoria de trabajadores. Como no lo logró, utilizó a activistas que insultaron, provocaron y golpearon en grupo a uno de los manifestantes.
Un video muestra a los activistas amedrentando a los trabajadores.
La autoconvocatoria surgió a media mañana de ayer, cuando un importante grupo de trabajadores decidió seguir el ejemplo de sus compañeros de otras localidades, quienes en los últimos días se movilizaron en defensa de los puestos laborales. Sin embargo, rápidamente surgió una contra marcha, presumiblemente convocada por el gremio para neutralizar el encuentro programado y evitar especialmente que los trabajadores se manifiesten frente al CET de Atilra. La idea era pedirle al secretario general que ceda a los pedidos del gobierno nacional para que se efectivice el préstamo que la compañía necesita para continuar operando.
Los auto convocados intuían las intenciones del gremio, así que demoraron la reunión con el fin de evadir a los activistas de Ponce que no se dejaron engañar. Fue así que los manifestantes se encontraron con una decena de gremialistas vestidos con camperones negros, quienes comenzaron a interrogarlos acerca de quiénes eran los autores de la convocatoria. Como la respuesta no los satisfizo, comenzaron los reproches. ¿Por qué no se convocan cuando hay que defender a otros compañeros o al gremio?, reclamaron en tono intimidante. Al no haber respuesta decidieron probar con las provocaciones y los insultos. Cuando uno de los empleados agredidos reaccionó, llegaron los golpes cobardes “en patota”. Según el relato de uno de los empleados auto convocados, por lo menos seis activistas golpearon al compañero agredido. “Nunca pensé que pasaría algo así en Sunchales”, afirmó el testigo y víctima de los actos intimidatorios de los colaboradores de Ponce, cuya identidad reservamos por cuestiones de seguridad.
“Llegué a casa y me sentí descompuesto. Mi mujer se dio cuenta y me ayudó a reponerme”, agregó el trabajador. También relató que había activistas gremiales no identificados mezclados entre los trabajadores. “Suponemos que era para escuchar quiénes organizaron la convocatoria y estar al tanto de los movimientos del grupo”, señaló.
La agresión se produjo sin que ninguna fuerza pública de seguridad intervenga para prevenirla y evitarla, una falla muy seria, ya que las leyes garantizan a los ciudadanos el derecho a manifestarse y peticionar y la sola presencia de efectivos policiales podría haber servido para disuadir a los violentos. No es la primera vez que esto pasa, ya que en el último paro nacional, mientras la empresa se hundía en la crisis, los mismos activistas de Ponce impidieron que los trabajadores que querían ingresar a la planta fabril para cumplir con sus tareas, pudieran hacerlo.
Intimidaciones en Brinkmann
Ayer por la tarde, mientras los graves hechos registrados frente a la planta de SanCor, llegaban noticias de otras localidades donde habían ocurrido hechos similares de intimidación por parte del gremio. Según trabajadores de la localidad de Brikmann, también allí los gremialistas impidieron que los empleados auto convocados se manifiesten.
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